El blackjack es un juego de cartas que se juega comúnmente con uno o más mazos de cartas, y su objetivo principal es obtener una mano cuyo valor se acerque lo más posible a 21 sin pasarse. En este emocionante juego de casino, los jugadores compiten contra el crupier y tienen la oportunidad de tomar decisiones estratégicas que pueden influir en el resultado de la partida.
A continuación, se presenta una tabla de puntuación que puede ayudar a los jugadores a calcular el valor de sus manos:
Cartas en Mano |
Valor de la Mano |
2, 3, 4, 5, 6, 7, 8, 9, 10 |
Valor de la Carta |
Jota, Reina, Rey |
10 puntos cada una |
As |
1 u 11 puntos |
El objetivo es formar una mano con un valor total más cercano a 21 que el de la banca, sin sobrepasar 21. Independientemente de la mesa elegida, las reglas son las mismas. Inicialmente, los jugadores y el crupier reciben dos cartas cada uno. Los jugadores reciben sus cartas boca arriba, una de las cartas de la banca se reparte boca arriba (la llamada "carta superior") y la otra boca abajo (la llamada "carta inferior").
El jugador puede tomar varias decisiones, incluyendo:
- "Pedir" (solicitar una carta adicional para acercarse a 21).
- "Plantarse" (no pedir más cartas y quedarse con la mano actual).
- "Doblar" (doblar la apuesta original y recibir una sola carta adicional).
- "Dividir" (si las dos cartas iniciales son del mismo valor, el jugador puede dividirlas en dos manos separadas y continuar jugando).
El crupier sigue unas reglas predeterminadas. Por regla general, debe robar cartas adicionales hasta que tenga un valor de 17 o más y, a continuación, plantarse. Por su parte, el jugador toma sus propias decisiones. Sin embargo, es importante recordar que es posible ganar si la mano tiene un valor más cercano a 21 que la banca, sin sobrepasar 21. Si el jugador o el crupier superan 21, pierden automáticamente (esto se denomina "bust").